Una aventura de miles de años, tejida de mitología e historia, marcada por las vidas de quien – artistas y promotores, narradores y oyentes – ha utilizado el arte para dar cuerpo al alma de una entera sociedad: esto es lo que cuentan las obras (ilustraciones, miniaturas caligráficas, esculturas, fotografías) de los cuartos dedicados al Irán, la Persia misteriosa de Las mil y una noches. Un viaje en la cosmogonía y en la creación de una cultura, vivida a través de sus imágenes y su relación con el signo, la escritura, sus libros más icónicos. Historias visuales donde la narración se convierte en poesía, canto, música.
Del Libro de los Reyes o Rostamnāmũ, que cuenta la historia de Irán desde los orígenes del mundo en un entramado inextricable de espiritualidad y vida, a las esculturas en papel maché de la joven Hajar Salimi, dedicadas a la tradición popular islámica y a las figuras icónicas del Islam: un viaje de revelación y maravilla, qua no conoce fronteras ni restricciones.
Ilustración de Pejmān Rahimizādeh, de Rostam va Esfandiār, Kanoon (particular)